Lic. Bruno Valle G. En la Biblia encontramos cientos de personajes, con temperamentos distintos, errores y aciertos, trascendentes e intrascendentes, emprendedores y fracasados, en fin, un universo de características fascinantes. En medio de ese mar de gente, hay alguien que se levanta, que es notorio, que se ha dejado ver todos estos siglos de cristianismo: Pedro, el humilde pescador, de gran temperamento. Vivía en la parte septentrional del lago de Galilea, y aparentemente era miembro de una cooperativa o empresa de pescadores, cuyos integrantes eran su hermano Andrés, y los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan. Al parecer, estos pasaron juntos probablemente desde la juventud. ¡Quién diría que aquel cuarteto sería protagonista de la más fascinante historia jamás contada! Su primer encuentro con Jesús El primer encuentro con el Señor manifiesta algo importante: al parecer él y su hermano Andrés buscaban ese contacto personal con Dios, necesitaban afer...